Como ya habréis podido comprobar más de una vez me encanta la moda, vista a mi manera, también tengo que decirlo, porque eso de ser un borrego más tampoco va conmigo, yo elijo cuando quiero, me quedo con lo que quiero y me lo pongo cuando me da la gana con lo que me da la gana, pero si hay algo que realmente me apasiona de este amado y odiado mundo a partes iguales, son los complementos y lo que más, bolsos y zapatos. Soy más que consciente de que estos pequeños objetos de deseo son los que realmente marcan la diferencia y mucho.
Mientras otros fijan sus sentidos en los estilismos y en los streetstyle de las pasarelas mundiales que se celebran estos días, a mi se me van los ojos en otras direcciones que distraen mi mirada de todo lo demás, como buena acuario… de esos que vivimos en nuestro mundo, propio, distraído y soñado.
Me gustan esos objetos diferentes, originales y que no se encuentran fácilmente…
Fotos: Vogue
Madrid, marzo de 2014